Un poema a una persona que quiero mucho.
Lo curioso de todo esto es que está escrito en papel higiénico, en una tira bastante larga, con partes rotas por el boli, y en algunos trozos las sílabas contadas.
Me sorprendió el valor que llegó a tener ese trozo de papel higiénico para mí, el cual representaba mi amor hacia ella, mi inspiración y arte manifestándose sin avisar y mi rebelión hacia el mundo.
Ahora lo miro, y si no lo leo lo veo como lo que es y será, un triste trozo de papel higiénico con el que podrías limpiarte después de ir al baño, o el que podrías tirar a la basura sin darte cuenta porque es eso, un trozo de papel medio roto.
