Al principio duele, luego te acostumbras, y al final quieres quitártelo.
Te tengo tatuado en mi mente, cuando miro te veo aunque no estés, y cuando cierro los ojos sigues ahí...
E incluso cuando duermo, te siento cerca, a mi lado.
Oliendo toda tu ropa, lo que huele a ti... me vuelvo loca.
No hay comentarios :
Publicar un comentario